Que delicia de plato, sencillo de preparar y exquisito. Tanto si os gusta la carne como si no, este plato os encantará. Hacedlo y ya me contaréis.
Ingredientes:
- 1 solomillo de cerdo.
- 1 barra de queso de rulo de cabra.
- 3 pimientos de piquillo.
- Leche y harina para la bechamel.
- Queso rallado.
- Aceite de oliva, sal, pimienta y nuez moscada.
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180º C.
Limpiamos el solomillo y lo cortamos en seis lonchas. Salpimentamos y colocamos entre dos lonchas de carne una de queso de rulo de cabra. Sujetamos con un palillo y en una sartén con un poquito de aceite de oliva bien caliente marcamos la carne unos minutos. Reservamos.
Preparamos una bechamel ligera. En un poco de leche batimos los pimientos del piquillo y se lo añadimos a la bechamel. Mezclamos.
Yo he usado cazuelas de barro pero si no tenéis podéis usar cualquier recipiente apto para horno. Ponemos en el fondo la bechamel de piquillo y encima la carne. Añadimos queso rallado e introducimos al horno unos 15 minutos, lo justo para que se gratine el queso.
Sacamos con cuidado, todos sabemos que el barro guarda mucho el calor y servimos inmediatamente.
Aconsejo acompañar de un buen pan para dejar las cazuelas relucientes porque si la carne con el queso está exquisita, la salsa no se puede desperdiciar.
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