Salchichas al vino

Vamos a ver preparar una receta muy sabrosa y a la vez riquísima, las salchichas al vino blanco.

Normalmente para preparar este plato se utilizan salchichas de cerdo frescas, las cuales tienen un gran porcentaje de grasas, pero en esta ocasión he aprovechado unas longanizas frescas bajas en grasa que tenía en la nevera, y ha quedado tan sabroso como de la otra forma.

Ingredientes para dos personas:

• 6 u 8 salchichas
• 1 cebolla mediana
• 1 diente de ajo 
• 1 hoja de laurel 
• 1 vaso de vino blanco (250 ml) 
• 1 vaso de caldo de pollo (250 ml) 
• 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra (40 ml) 
• 1 cucharada pequeña de sal 

Procedimiento para preparar las Salchichas al vino;

1. Necesitaremos dos sartenes diferentes, una de tamaño mediano-grande para la cebolla y el ajo y otra mediana para las longanizas. 
2. Pela el diente de ajo, córtalo en trocitos y resérvalo aparte. Pela la cebolla y pícala finamente. 
3. En una sartén añade dos de las cuatro cucharadas de aceite virgen extra, la cebolla, la hoja de laurel picada y media cucharadita de sal. Déjalo a fuego medio mientras se pocha la cebolla, espera 5 minutos y añade el ajo que habías reservado. 
4. Mientras se pocha la cebolla puedes ir preparando las salchichas. En la sartén mediana añades las otras dos cucharadas de aceite virgen extra, agregas las longanizas y las dejas a fuego medio para que se vayan haciendo poco a poco. 
5. Cuando la cebolla esté pochada sube el fuego de las dos sartenes. Queremos que la salchichas y la cebolla cojan un poco de color tostado, pero cuidando de que no se quemen. Cuando la cebolla haya cogido un poquito de color la juntamos con las salchichas y el vaso de caldo (si está caliente mejor). 
6. Introducimos el vino en la sartén donde se estaban cociendo las salchichas y lo ponemos a fuego fuerte. Cuando empiece a hervir, rascamos el fondo de la sartén con una cuchara de madera para recoger los jugos que haya soltado la salchicha. Lo dejamos hervir un par de minutos para que se evapore el alcohol y lo añadimos a la sartén con la cebolla, el ajo, las salchichas y el caldo de pollo. 
7. Lo dejamos a fuego medio durante unos minutos hasta que se reduzca el agua y el líquido se convierta en una salsa densa.
8. Cuando esté la salsa en su punto prueba de sal, si el caldo de pollo estaba salado quizás no necesites más, pero si no llevaba sal es posible que tengas que añadir media cucharadita de sal.

Si no tienes caldo de pollo sustitúyelo por agua con media pastilla de polvos para caldo concentrados y no añadas nada más que la sal que lleva la cebolla al principio (las pastillas de caldo suelen se muy saladas).

Al principio puede parecer que hay demasiado líquido y que se tarda demasiado tiempo en preparar pero es así como debe ser. De este modo las salchichas se cuecen tanto por dentro como por fuera, y no se queda el interior crudo.

Si tienes niños que no les gustan las verduras y prefieres que no se vea la cebolla solo tienes que sacar las salchichas y pasar la salsa por la batidora. No se darán ni cuenta!